Te vi y me pregunté: ¿Qué hago con esta mochila?. La he cargado por años y la he llevado por donde quiera que haya ido.
A titulo de qué?. Si cada día que pasaba el peso era mayor y mi espalda ya no lo soportaba.
Entonces, cuando te vi me dije: vas a enterarte que fue de mi durante todo este tiempo que transcurrió desde nuestro último verano, mientras vos transitabas tu camino y yo el mío.
Que cuando nos separamos, todos mis sentidos respondían a un solo nombre. Y te dejé. Aún amándote, te deje. Y a pesar de no haberte visto por mucho tiempo, el sentimiento que me unía a vos siguió siendo el mismo. No así el tuyo.
Y esto lo puedo afirmar porque casi inmediatamente iniciaste una nueva relación.
La que también padeció la irresponsabilidad de las amistades que frecuentabas, las mismas que soporte y acabaron con nuestra relación.
Y seguí la vida. Sin olvidarte.
Tuve otras relaciones, pero nunca un sentimiento como el que me unía a vos.
Y cuando supe que te casabas, te dije chau! Pero no te lance de mi vida.
Perdidas las esperanzas del reencuentro me dejé llevar por senderos desconocidos pero que me ayudaron a superar tu desamor.
Y la vida continuó. Cuanto tiempo que paso!.
Por eso cuando te vi me dije: es necesario que conozcas el contenido de esta mochila, que como no me pertenece, no quiero cargarla más.
...y te escribí una carta...
Te detalle en ella un breve y conciso relato de mi vida. La que correspondía haber sido vivida pero con vos, pero como no fue y no será, te la devolví. En tinta verde te devolví los sentimientos que no recuperaré jamás.
Por eso ,a partir del momento que leiste mi carta, siento un gran alivio. Ahora veo a los que me rodean sin verte mezclado entre ellos. Ahora serás vos quien deberá resolver que hacer con esa carga.
A pesar de comprender que debería haberlo hecho mucho antes, siento que no es tarde.
Hoy estoy en paz conmigo y con vos.
Por eso ante tu indiferencia y que hayas evitado saludarme cuando nos cruzamos, ya no me duele.
Hoy estoy segura que sos vos quien no sabe que hacer con semejante carga... y te comprendo.
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